Las nuevas tendencias en el mundo de los eSports

En un mercado que no para de crecer, el objetivo principal es seguir evolucionando para no perder audiencia. 

El crecimiento de los eSports parece disparado. Si bien los últimos 10 años han sido clave para su expansión y consolidación, los últimos 5 han representado una subida espectacular en materia de seguimiento. En la actualidad, estamos ante un fenómeno que congrega a más de 500 millones de espectadores anuales. Y la previsión parece bastante optimista, dado que el grado de conocimiento popular de estas disciplinas va en aumento, siendo un tipo de actividad que ya conoce una parte importante de la población mundial.

Pero, ¿qué tienen en mente los organizadores de estas competencias para adaptarse a un público cambiante? ¿Cómo quieren seguir creciendo de forma sostenible y adelantar a otros deportes? Lo cierto es que existen una serie de tendencias que pueden ser percibidas por los espectadores. Veamos algunas de ellas:

El triunfo del celular

El dispositivo móvil es el gran triunfador del universo “gamer”. Hoy, esta herramienta que siempre va con nosotros, se ha convertido en el medio por excelencia para acceder a los juegos. Su crecimiento está desbancando a otras opciones como las consolas o la computadora. Conscientes de ello, los desarrolladores están lanzando títulos exclusivos para este entorno o adaptando algunos de los que tiene más éxito en el ecosistema de los deportes electrónicos, como ha ocurrido con League of Legends y su Wild Rift o con Call of Duty y el COD Mobile. 

El último (por ahora) en añadirse a esta estrategia ha sido el reconocido “shooter” de Riot Games. Este título, cuyas competiciones tienen una audiencia tal que, incluso, son de los apartados más seguidos en las plataformas de pronósticos que centran su atención en los grandes eventos de Valorant, ya ha puesto en marcha su versión “Mobile”. De momento, la Beta sólo está disponible en China, pero se espera que durante este 2023 pueda llegar a todos los aficionados del mundo.

Un salto tecnológico

A nivel técnico, por un lado, y siguiendo el punto anterior, encontramos las nuevas redes de datos móviles, como el 5G. Esta tecnología es clave para que aquellos aficionados que se decanten por el celular dispongan de una conexión estable y rápida. A día de hoy, las redes sociales son el vehículo principal para seguir las retransmisiones de los eventos de eSports. Este nivel de streaming requiere de una conexión potente y, si no estamos utilizando el WiFi, debemos disponer de una red móvil de última generación para poder tener la mejor experiencia posible.

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Por otra parte, y centrándonos en los juegos en sí, la Realidad Virtual ha evolucionado considerablemente gracias al proyecto del Metaverso (que aún no sabemos si, finalmente, se materializará). Todos estos avances pueden ser de aplicación en nuevos juegos, con gran capacidad inmersiva, que tienen capacidad para triunfar en los deportes electrónicos. El futuro de los eventos puede estar poderosamente ligado a estos nuevos entornos y a juegos que aprovechen esta tecnología. Dependerá, por supuesto, de la capacidad de retransmitir esta experiencia a través de los medios actuales.      

Llegada a la televisión

Las redes sociales han tenido un papel capital a la hora de introducirse en el público más joven. La elección de este medio ha permitido conectar con una masa importante de la sociedad, gracias a su modernidad, su carácter internacional y sus constes reducidos. Sin embargo, parece claro que la televisión puede ser vital para ampliar la base de público, ya que aún sigue teniendo un papel capital en los diferentes hogares. Algunas cadenas televisivas, conscientes de la magnitud del fenómeno de los eSports, ya han empezado a firmar contratos para cubrir distintas ligas, que tienen un target de espectador que les resulta muy atractivo (a ellos y a los anunciantes).

Por supuesto, estas son sólo algunas de las líneas que podemos percibir, a priori, para el corto plazo. Aunque también hay otras, como el papel estratégico de Latinoamérica en la expansión de los deportes electrónicos o la incentivación de los torneos locales “amateurs”. Evidentemente, los gustos y las preferencias van cambiando, con lo que lo más probable es que algunos de los cambios nos acaben sorprendiendo. Lo que no nos va a sorprender es la imparable y constante evolución de este fenómeno.